domingo, 29 de agosto de 2021

Dark Waters (Aguas Oscuras)

 

Observamos un mirlo acuático en unas aguas transparentes, oxigenadas y sin olor extraño y lo asociamos a un rio ambientalmente saludable. No obstante, los contaminantes letales artificiales han llegado hasta los rincones más remotos y pasan desapercibidos.

 

Las pelis son un producto fácil de consumir que no requiere el esfuerzo intelectual de leer, así que son una herramienta ideal con la que lograr un cambio cultural.

 

Recientemente vi la película Dark Waters, disponible en Netflix. Lo que deben sufrir los magnates de la industria química cuando se ven incapaces de evitar que sus grandes vergüenzas se vean expuestas con esplendor en un espectáculo Hollywoodiano y que vuelen de Estados Unidos al mundo. Es la libertad de expresión, somos nosotros contra ellos.

 

Aguas Oscuras es una historia cruda que relata cómo el abogado Rob Bilott peleó contra un auténtico megamonstruo de la economía mundial, la empresa DuPont, a lo largo de dos décadas. Lo que muchos sabíamos, que las empresas químicas están por encima de la vida humana y la soberanía de los gobiernos, que hasta exhiben conductas criminales, se ve bien reflejado en Dark Waters.

 

Rob representaba directamente a unos miles de ciudadanos afectados por la contaminación deliberada de la fábrica Dupont, tanto a través de sus productos cómo de sus desechos. Sin embargo, en realidad, los afectados son casi la totalidad de los habitantes del planeta atendiendo a que sobre el 99% de nosotros llevamos los residuos de DuPont en nuestras venas. Y el resto de los seres vivos tampoco se escapan del legado de dicha empresa.

 

La lucha era contra la contaminación que DuPont perpetró con la fabricación de las sustancias perfluoroalquiladas o polifluoroalquiladas (PFAS). Es una familia de sustancias químicas artificiales, creadas por nosotros, que no se degradan. Al no degradarse, permanecen en el medio ambiente o en nuestros cuerpos, no desaparecen.

 

El ácido perfluorooctanoico (PFOA) o C-8, es uno de los PFAS más extendido por su propiedad impermeabilizante y antiadherente.  El PFOA se utiliza para producir el archiconocido teflón e infinidad de productos y artículos (productos de limpieza, pinturas, ropa, envoltorios de comida rápida, cajas de pizza, bolsas de palomitas para microondas, plásticos, espuma de extinción de incendios, etc.

 

Rob Bilott consiguió que se hiciera un potente estudio epidemiológico en el que participaron miles y miles de afectados. El estudio demostró que la exposición reiterada al C8 estaba relacionada con el cáncer de riñón, el cáncer testicular, los problemas de tiroides, preeclampsia (problemas graves en el embarazo), colesterol elevado y colitis ulcerosa. La administración pública de Estados Unidos acabó reconociendo que el PFOA tiene efectos perjudiciales en el desarrollo del feto.

 

La encrucijada de Bilott comenzó en la década de los 90s, pero aún no ha terminado…porqué sartenes, ollas, bandejas de cocina, e infinidad de productos cotidianos llevan teflón y otras sustancias malditas que se liberan y acaban en tú cuerpo. Es tal abrumante el poder de la industria que la única forma de protegerse y doblegarla es informarse y consumir inteligentemente.

 

Sustancias perfluoradas en España

La pasada década se publicó un estudio (Bartolomé et al. 2017) que trataba sobre la distribución de estas sustancias en los adultos de España a escala geográfica y sobre los determinantes de la exposición.





Este mapa proviene de Bartolomé et al. (2017) y se ve representada la exposición de las personas adultas a las sustancias perfluoradas por tonalidades de grises (a más oscuro mayor incidencia). La autonomía con más exposición fue Catalunya, seguida de Galicia y el País Vasco.

 

La exposición a estas sustancias tan peligrosas y persistentes se debe a la industria. Así pues, a muchos ciudadanos, sobre todo los de las autonomías con más exposición, nos gustaría conocer cuales son las empresas que están poniendo en riesgo nuestra salud y vida cerca de casa ¿Alguien está haciendo algo?

 

Por cierto ¿Existe algún precedente de demanda colectiva lejanamente parecido al de Bilott contra DuPont en España? España es una democracia de las buenas, buenas, la mejor.

 

En caso de que hubiera algún abogado con ganas de involucrarse en España (JAJAJA), aquí tiene más información legal al respecto, sobre lo que son capaces de lograr sus colegas norteamericanos:

https://es.levinlaw.com/dupont-c8-litigation

También, quién quiera, puede pedir más información o buscarla (JAJAJA), dirigiéndose a las ubicaciones de DuPont en España, donde hasta tiene parte de su producción:

 

La web:

https://www.dupont.es/

 

Direcciones y teléfonos:

  • Asturias, DuPont Asturias S.L. Valle de Tamón-Nubledo, 33469 Carreño, Tel: +34 985 12 4000
  • Barcelona (La ciudad condal). DuPont Ibérica S.L. Barcelona, Avda Diagonal 571, Edificio L'illa Diagonal, 8029, Tel: +93 227 6000
  • Madrid. DuPont Ibérica, S.L. C/Ribera de Loira, 46 – Edificio 2, Campo de las Naciones 28042 – Madrid
  • Valencia. DuPont Nutrition and Biosciences Ibérica S.L. Avenida de Espioca 22, E-46460 Valencia. Tel: +34 96 121 21 11

 

Bibliografía


Bartolomé, M., Gallego-Picó, A., Cutanda, F., Huetos, O., Esteban, M., Pérez-Gómez, B., Bioambient.es & Castaño, A. 2017. Perfluorinated alkyl substances in Spanish adults: Geographical distribution and determinants of exposure. Sci. Total Environ.


domingo, 22 de agosto de 2021

La Verdad Duele

 

La siempreviva (Sempervivum montanum) es una planta capaz de sobrevivir en ambientes especialmente duros y austeros, llegando a presentarse en los hábitats alpinos.

Estáis ante un post largo, os aviso. Se inspira en la película titulada así (La Verdad duele). Al margen de la simpatía o antipatía que sintamos por el cine de Hollywood, posee un ingrediente ejemplarizante respecto a la industria cinematográfica de nuestro país:

 

La denuncia pública y la actitud reivindicativa que los actores y los cineastas estadounidenses de prestigio exhiben ante los escándalos mayúsculos de la historia reciente de su propio país. Cuando se arremangan, si es menester arremeten contra los pilares más consagrados de su tan querida patria y tanto les da el tremendo poder económico, político y social al que sacudan. Al fin y al cabo ¿No va de eso la democracia?

 

En nuestro país, el cine de primera división no se dedica a tales menesteres, igual que la música de la movida madrileña no solía entrar en asuntos molestos para con los poderes económicos. Solo así se explica que una de las mayores tragedias sufridas en España, el envenenamiento por colza del 1981, no haya merecido nunca ninguna atención cinematográfica hasta este año, momento en que se ha estrenado un documental (Colza, lo invisible). Evidentemente, un documental no tendrá apenas ninguna repercusión social. En España de censura democrática sabemos un rato.

 

Volvamos, no obstante, a La Verdad duele. Se basa en la guerra titánica que un doctor nigeriano (Bennet Omalu) libró a lo largo de una década con el fin de demostrar los tremendos daños cerebrales sufridos por los jugadores del futbol americano a causa de los golpes reiterados en la cabeza. La NFL (La Liga Nacional de Futbol, americano) es una industria colosal capaz de congregar a cientos de millones de personas frente a la caja tonta durante una final. Mueve unas cantidades de dinero inimaginables y es un tótem absoluto de los Estados Unidos. A escala profesional y social, molestar a la NFL es un suicidio.

 

Bennet Omalu, una persona que creía en el juramento hipocrático hasta las últimas consecuencias, fiel al genuino espíritu de la ciencia (la búsqueda y defensa de la verdad), se enfrentó a la NFL. Quería demostrar ante el mundo la relación entre las lesiones cerebrales y las muertes prematuras de los jugadores profesionales de futbol americano. Lógicamente, la maquinaria de la NFL y los círculos de poder afines, contraatacaron, negándolo todo y colocando a Bennet en una diana enorme. Un ingrediente esencial de la historia es que Bennet Omalu se pagó de su bolsillo las investigaciones, lo cual nos indica que estaba sólo en esta guerra ¿Hacerse enemigo de la NFL por compromiso altruista con la vocación? Eso es ser un superhéroe.

 

La patología cerebral sufrida por los jugadores profesionales de futbol americano no se detectaba en vida, sino que solamente aparecía la prueba física cuando una vez fallecidos se sometía a los jugadores a una autopsia exhaustiva en esa dirección, cosa que solamente hizo Omalu. Omalu se encontró con que en vida se había etiquetado a los jugadores cómo personas con problemas mentales y oficialmente la muerte se había atribuido a una causa no relacionada con la real. Pero ¿No existía ningún precedente extrapolable de esa patología cerebral? Pues sí, puesto que esta patología, la Encefalopatía Traumática Crónica, incluso había sido descrita anteriormente en boxeadores, por ejemplo.  

 

Y ahí estaba Bennet Omalu, que encima era de color y nigeriano, obcecado en explorar los cerebros de esas grandes glorias, triunfadores del sueño americano que enfermaron gravemente, lo perdieron todo y murieron en circunstancias dramáticas, con la finalidad de demostrar de forma impepinable que esas personas habían padecido una enfermedad de origen físico. Después de años, a pesar de la tiranía de los poderosos que siempre quieren imponer sus mentiras, la verdad de Bennet Omalu brilló.

 

La humanidad le debe tanto a personas cómo el…mientras nuestra sociedad se fundamenta en una mayoría de pobres de espíritu, de conciencia elástica y de capacidad mediocre que prosperan a base de mezquindad, unos pocos son capaces de erguirse firmes contra la miseria humana y vencer al conglomerado inmundo, insípido y fétido.

 

La historia contemporánea nos lo ha demostrado…

Una y mil veces: la ciencia y la medicina están corrompidas. Al PODER con mayúsculas le sobran los abogados, doctores, investigadores, periodistas y políticos que juegan en su equipo, enfrentados al interés general, opuestos a la misma viabilidad futura de la especie humana. Lo vimos con la guerra del tabaco en Estados Unidos y con tantas otras y hoy, más que nunca, lo dominan todo.

 

El marketing del tabaco ha sido y es omnipresente y espectacular. Con la de multitud de aditivos perniciosos que incluye, nos lo permitían consumir hasta dentro de los hospitales, años después de haberse demostrado sus efectos tremendamente perjudiciales. Hace unas semanas mí tía, gravemente enferma de asma, y también sufriendo durante años síntomas típicos de Sensibilidad Química Múltiple (sin diagnosticar por la sanidad pública catalana, cómo es natural) estuvo en la UCI de un hospital por un trombo pulmonar. En una de las ocasiones en que la enfermera entró en su habitación mí tía notó un fuerte olor a tabaco y se lo dijo. Resulta que la enfermera había salido a fumar fuera del hospital, pero el humo había entrado adherido con ella a una habitación de UCI donde había una enferma pulmonar grave.

 

Si, se prohibió fumar dentro de los hospitales, los edificios públicos, los bares, las discotecas, etc. Desgraciadamente, se siguen fabricando cigarrillos con toda la ingente cantidad de aditivos perniciosos y el tabaco habita cualquier lugar público de una forma u otra (calles, playas, monte, y hasta hospitales). Es la dictadura del que impone ese producto y se lucra con él.

 

Fijaos este verano, y los de las últimas décadas, cuantos incendios se han provocado por la maldita colilla arrojada por el puerco o la puerca de turno. Es impresionante la cantidad de incendios y conatos originados por la colilla del infame en los márgenes de las carreteras, las autovías, las autopistas, las áreas de servicio o descanso, las pistas rurales, etc.

 

La costumbre está penada administrativamente. Se puede y debe sancionar a quién tira la colilla por la ventanilla, aunque, lógicamente, es inviable controlar a los millones de puercos que recorren la geografía peninsular con su vehículo y pillarlos justo en el momento en que cometen la estupidez supina. Si, en España abundan los puercos y las puercas. Es una realidad que descubriremos a diario a poco que nos fijemos. De todas formas, tengo dudas acerca de que los agentes de la autoridad (locales, autonómicos y nacionales) estén suficientemente motivados con el objetivo de multar a estos personajes…cómo cuerpos jerárquicos imagino será relativo a las directrices prioritarias que establezcan los mandos.

 

Os propongo un reto divertido: preguntad a vuestro ayuntamiento a cuantas personas ha sancionado el último año por lanzar una colilla desde dentro del coche. Estoy más que seguro de que os avergonzará conocer la respuesta. Podemos subir la apuesta y hacer la pregunta a la autonomía. Esta serie de ejercicios son idóneos cuando uno quiere cerciorarse de si las normas en nuestro país existen para hacer bonito o realmente la administración pública persigue en serio el objetivo de que se cumplan.

 

Cierto es que también se le podría poner más fácil al agente de la autoridad, prohibiendo fumar dentro de un vehículo en marcha o parado. Eso es fácil de sancionar y controlar. Además de la justificación de la salud y la de los incendios, cuando uno fuma mientras conduce, limita su campo de visión, su atención a la carretera y su capacidad de maniobra del vehículo, y todo ello contraviene el Código de Circulación mismo. Ahora bien, es el PODER de la industria del tabaco quién sigue marcando las normas del juego ¿Soberanía de las administraciones públicas? JAJAJAJAJA, CADA VEZ QUE UN POLÍTICO ENCORBATADO LO DICE EN CATALUNYA, O EN CUALQUIER OTRO LUGAR DE LA GEOGRAFÍA ESPAÑOLA, ME TRONCHO.

 

Nos quedan muchos fuegos que sufrir y luego la culpa será del bosque, de que está sucio y etc. La perversión del lenguaje gracias al periodismo mediocre, zafio, inculto y malintencionado, en virtud del lobby maderero y de los propietarios forestales, consigue adoctrinar a las personas con ojo e intelecto de pez. La gente repite el mantra que ha ido escuchando, tal cual un autómata sin materia gris ni fundamento.

 

El único mensaje que nos propone y publicita el periodismo es matar el bosque antes de que se muera por los incendios provocados por las personas, sin contraste con otros enfoques. El colmo del cinismo. Cómo si los culpables de los crímenes de guerra, de las masacres de civiles, nos dijeran que, puesto que un día u otro los ciudadanos iban a enfermar y sufrir dolor y muerte por el colesterol, los virus, las bacterias u otros problemas de salud, pues está justificado acabar con esas personas preventivamente y evitar ese mal.

 

Claro, que, si uno se pone a analizar bien la situación, da la coincidencia que justo después de la crisis de la construcción, se pusieron a repartir subvenciones a saco para cortas en fincas forestales. En Catalunya, la misma administración pública que está obligada a conservar la biodiversidad (la Generalitat) por esos tiempos aprobó una ley que obliga a los propietarios a mantener sus fincas limpias. Chocaba que justo por esa época, con los convergentes dominando la Generalitat y también la Diputación de Barcelona, se suprimieran los vigilantes de incendios los meses de primavera en los parques de la Diputación. Qué raro ¿No?

 

Durante los años dorados del tocho se compraron fincas forestales (montañas) por aquello de la ostentación, e imagino que también algún interés fiscal podría existir. Entonces había dinero con el que mantener un yate, varias segundas residencias, y pagar el IBI de las fincas forestales. Una vez que pinchó la burbuja, no veas la de yates que se pusieron a la venta, casas y etc. Pero la cooperación público-privada pronto resolvió la ecuación y ahora pagar el IBI de las fincas forestales es posible e incluso brota algún que otro sobrante…la administración pública reparte billetes a saco para cortar. Cortar en época de cría y dentro de espacios naturales protegidos a escala europea, sean privados o públicos, afectando a miles y miles de nidos de especies protegidas es ahora algo normal y generalizado en todo el territorio catalán. La administración pública cagándose en la ley, lo más normal ¿Quién lo va a denunciar? ¿Las entidades ambientalistas subvencionadas? JAJAJAJAJAJAJA.

 

Décadas atrás ardían terrenos rústicos que después se recalificaban como urbanizables. Hoy en día, los incendios parece que tienen su lado rentable, nos han creado la necesidad de creer en las bondades de la publicitada limpieza del bosque a través de la radio, la televisión, el periódico, etc. No profundizaré hoy en el punto de vista científico, todo y que cabe mencionar de pasada que las actuaciones de eliminación radical del sotobosque ocasionan el empobrecimiento del suelo, una mayor penetración de la radiación solar, el descenso de la humedad ambiental, la eliminación de la sucesión vegetal (de los árboles que formarían el bosque clímax en el futuro) y el crecimiento de la vegetación pirófita. En resumen, tal y cómo se están aplicando, de forma generalizada y sin tener en cuenta los criterios de conservación del ecosistema ni las leyes, las actuaciones forestales son contraproducentes para la salud del bosque y pueden favorecer los incendios.

 

Tengo un defecto, lo asumo: me cuesta poco pensar mal. Entonces, con el paro existente me escama el por qué no se invierten recursos sobre todo en el incremento de la vigilancia activa de prevención de los incendios en toda la geografía. Me asombra que no se aumente el número de agentes de la autoridad dedicados a sancionar y aplicar indiscriminadamente la sanción dura, prohibir y erradicar costumbres cómo la de lanzar el cigarrillo desde un vehículo, y tantas otras cosas que integrarían una verdadera política proactiva de evitación del incendio. Lo sé, no se debe matar a la gallina de los huevos de oro.

 

Están por el tema de soltar pasta pública, dirigida a los propietarios forestales y la industria de la madera, y subastar centenares de kilómetros cuadrados de monte público, dilapidando la riqueza natural de todos.

 

La SQM y otras enfermedades ambientales

El fondo de los problemas no es más que esto: el dinero y el poder. El ejemplo del fútbol americano y el del tabaco son muy populares, ilustran la guerra contra la ambición y la codicia, contra el mal en su esencia más pura. Es el mal orquestado desde el ápice mismo de la pirámide el que ordena a las piezas de los estratos inferiores cuales son los mecanismos válidos y elimina las fichas que no convienen. Es una pirámide que no funciona según la lógica del bienestar común porqué los del ápice son unos tarados.

 

  • Por eso, un enfermo de Sensibilidad Química Múltiple (SQM) es la amenaza suprema, ya que desacredita a la industria al completo, a la suma de grandes PODERES. Porqué una enferma de SQM sufre el efecto de cualquier aditivo pernicioso utilizado en cualquier rama de la industria (ropa, comida, mobiliario, automóviles, material de construcción, productos de higiene corporal o doméstica, etc.) y el mal que le provoca convierte su vida en una pesadilla.
  • Por eso, los doctores y las doctoras de la sanidad pública niegan el origen físico de los síntomas de las enfermas y las ofenden a ellas, a su profesión, a su juramento hipocrático y a los ciudadanos que con sus impuestos han pagado la educación pública que recibieron. La alarma social que va contra los intereses del PODER es desactivada por los profesionales de bata blanca.
  • Por eso, la sanidad pública maltrata y tortura a estas enfermas al no poner en marcha una atención especializada que evite someterlas a los tóxicos que las hacen enfermar gravemente en los mismos centros sanitarios. Es decir, se les niega la atención sanitaria ya que muchas no podrán acudir al médico en esas condiciones.
  • Por eso, las enfermas de SQM están excluidas socialmente en cualquier sentido y no les ampara la ley, aunque todos sus derechos esenciales (de libertad de movimiento, derecho a la salud, a la vivienda, a una vida mínimamente digna, etc.) sean vulnerados cada día y en cualquier lugar debido a todos esos aditivos nocivos empleados e impuestos por la industria en cualquier rincón de la civilización. Son las barreras invisibles impuestas por la industria.
  • Por eso, las asociaciones de enfermas con juntas títere no luchan contra las administraciones públicas que no respetan sus derechos, sino que las defienden en las redes sociales y las felicitan, o bien callan cobardemente.
  • Por eso, las asociaciones feministas dan la espalda a las enfermas de SQM.
  • Por eso, los sindicatos importantes no han hecho nunca nada por las enfermas de SQM y los pequeños solamente se han implicado excepcionalmente en algún caso.
  • Por eso, los políticos de cualquier color siguen ignorándolas.

 

Y con él por eso se podría llenar un libro. Tú que estás leyendo esto, por supuesto, no tendrás la culpa. Tranquilo, la culpa siempre es de otro, y, además, cómo no sufres SQM, no es tú problema. No obstante, muy seguramente acabarás padeciendo alguna enfermedad ambiental provocada por los contaminantes, al igual que tus hijos, tus nietos y etc. En efecto, los contaminantes te rodean a cada momento, en tú shampoo, tú desodorante, tú detergente, tú suavizante, tú colonia, tú ambientador de casa o del coche, etc.

 

Los refugiados

Estos últimos días, otra tragedia más. Unos cuantos de esos actores que interpretan el papel de presidentes de países occidentales han decidido que ahora en Afganistán se tienen que espabilar solitos. En estos días aciagos no falta el político oportunista de ayuntamiento, de gobierno autonómico o del gobierno central que sale al circo mediático a dejar claro que el está por acoger a los refugiados afganos. Hablan de acoger a unos cientos y con eso queda todo arreglado. Quedan bien con cuatro palabritas que no provocan problema ni agravio a ningún poder económico y pelillos a la mar.

 

También hemos visto las primeras acciones reivindicativas de las feministas en nuestro país a favor de las mujeres afganas.

 

Y no es que vea mal que estas acciones o declaraciones sucedan, al revés, pero los y las afganas llevan siendo pasto del olvido durante años y en unos días, mucho me temo, que el tema dejará de ser actualidad. Ya sabéis, los millones que quedaron en la nueva negritud de Afganistán, no existirán.

 

La realidad inventada o imaginada es todo aquello que no existe más que en la mente de los humanos. El código de valores, las leyes, etc., son invenciones humanas que sobre todo se inventan, aplican e imponen desde arriba y con estos artificios se logra controlar a la masa de ciudadanos. Las reglas del juego, lo bueno y lo malo, lo que tenemos que decir y lo que no, y cómo decirlo se imponen desde el ático de la pirámide y, por supuesto, los que viven en él no están dispuesto a respetar nada ni estarán sujetos a nada NUNCA.

 

Hoy toca que ocupen el mundo periodístico los pobres afganeses, cómo algo así de “mirad, estamos hablando de ello en la tele; libertad, libertad de prensa” y “los gobiernos occidentales no tienen la culpa, son buenos”. Es lo que les dejan escenificar durante unos días, dentro de los límites patéticos autorizados de la estética. Porqué, en definitiva, cabe señalar que la culpa es de esas tierras lejanas y no del mundo occidental. No se apunta con el dedo el interés económico de unos pocos que si cabe organizan guerras desde la sombra y después, si te he visto no me acuerdo.

 

Claro, que de refugiados los hay de muchas clases. También existen los refugiados ambientales. Dentro de este grupo se sitúan las enfermas de SQM, consideradas un tabú por los periodistas, las feministas y los políticos. Las enfermas de SQM viven como la casta de los intocables de la India, aquí, a pocos kilómetros de la casa de un periodista, una feminista o una política española y/o catalana (según los gustos) ¿La compasión solo la sienten por las mujeres afganas y no sienten ninguna por las enfermas de SQM de aquí? No me cuadra.

 

Será cosa de la culpa. Las refugiadas ambientales enfermaron aquí, a mayor gloria de las industrias, por los contaminantes y empeoran por las ingentes cantidades de aditivos industriales nocivos para la salud permitidos por los políticos, los toxicólogos y los legisladores, entre otros. Enfermaron por una exposición laboral debida a una muy deficiente seguridad en el manejo de los productos o por otras fuentes de exposición. Los culpables en esta ocasión no viven en un país lejano y subdesarrollado, son europeos. Aquí está el escozor: las refugiadas ambientales no merecen atención, los límites de la realidad inventada por los del ático de la pirámide las excluyen y vetan en el escenario público a cualquier nivel.

 

Me parece obligatorio que cada mujer asesinada por su ex abarque espacio informativo en los medios periodísticos y en las redes sociales, y que ocasione una reivindicación feminista. Y en ese hilo, me recalcitra que los miles de mujeres con SQM españolas maltratadas por el sistema público, malviviendo, no merezcan ninguna atención. Nunca es noticia que una enferma de SQM se suicide por el suplicio de vida a la que la condenan, directa o indirectamente, desde la administración pública.

 

El motivo es la pasta, no la tuya, sino la de los del ático de la pirámide. Nada más existe su realidad imaginada.

 

¡Sois unos somáticos!



El uso de sustancias psicodélicas ha sido recurrente desde la antigüedad. Lo lamentable es que hay gente que va a por tabaco y nunca regresa.

 

Cuando infinidad de enfermos demandaron a la industria tabacalera norteamericana por daños contra la salud, surgieron unos denominados investigadores que argumentaban que los enfermos de problemas cardiovasculares eran personas con patrón de comportamiento tipo A (personas ansiosas, nerviosas, etc.). Con esa argucia establecían una relación entre sus enfermedades y un origen emocional, no físico. El tipo de ciencia, por llamarlo de algún modo, que hacían esos investigadores fue catalogada cómo ciencia zombi. La CIENCIA (con mayúsculas) acabó desmontado esa tergiversación de la realidad sin base objetiva y, además, se acabó demostrando que había intereses en la sombra que relacionaban a esos personajes con la industria tabacalera. Este tema fue tocado en Perro Verde en el post Hospital Clínic (IV) del 17 de junio de 2020. El enlace:

 

https://perroverdeweb.blogspot.com/2020/06/hospital-clinic-iv.html

 

Cómo el hedor a rancio está de moda en nuestros tiempos, la esencia de la ciencia zombi se ha consolidado. Han hecho una remasterización, le han dado un aire así medio hippie, oriental, con el rollo de las energías y el Karma, y tal, aunque realmente no son los colores del arco iris los que brillan tras ello.

 

No dudo que ciertos actores se hubieran tomado el LSD demasiado en serio, o quizá tuvieran un mal viaje ¿Quién sabe? La certeza reside en que, en medio de todo ese embrollo sideral, gracias esa diarrea mental que flirtea con la metafísica, ocurre que la relación de las enfermedades con los contaminantes queda relegada al olvido. Es la ceremonia de la confusión y la mentira, lo habitual.

 

El 6 de mayo de 2020 dentro del programa L’ofici de viure (El oficio de vivir) de TV3 entrevistaron al cardiólogo Manel Ballester. Hace pocos días volvieron a emitir la entrevista y la vi. ¡¡Joder!! ¡¡Me entró una piloerección al escucharle!!

 

Ballester relacionaba las patologías del corazón con el biocampo, con la somatización (convertir los problemas psíquicos en síntomas físicos) y con los disgustos emocionales y tal, etc.  Nos decía que con los disgustos emocionales se alteraba el campo magnético del corazón y entonces también el resto de campos magnéticos que dependen del corazón, y como consecuencia somatizamos. JAJAJAJAJA. De ahí puede pasar a desencadenarse un problema en otros órganos (según él). La salud (citando sus palabras) consiste en estar bien con uno mismo y dar amor y recibir amor ¡BRAVO! Su cosmología ve al corazón cómo una antena que emite buenas y malas vibraciones. En este enlace visualizaréis la entrevista entera (es cortita; 4 minutos y 36 segundos):

 

https://www.ccma.cat/tv3/alacarta/lofici-de-viure/manel-ballester-el-cor-tolera-malament-la-pena-tolera-malament-la-frustracio/video/6041707/

 

Me escama que hablase de antenas y campos magnéticos, pero no mencionara la telefonía móvil, el 5G, el wi-fi, los routers, el humo, la contaminación acústica, etc.

 

Está de moda quién te cuenta que los problemas de salud no provienen de la contaminación, sino de que la persona ha somatizado, de sus malas energías y etc. JAJAJAJAJA. Es la misma argumentación sin base científica que la Generalitat de Catalunya aplica con las enfermas de SQM en sus hospitales de referencia (cómo el Hospital Clínic): son unas somáticas, sufren sugestión (histéricas sería el término técnico de décadas atrás).

 

Cómo ese mensaje no se combate ni se desmonta, sino que el personal técnico, científico, periodístico, feminista, político, de entidades de enfermas, lo abona, ahora vemos los resultados. La planta ha crecido y da sus frutos, una especie de psicodelia cínico-sádica de nariz larga.

 

En realidad, a los estamentos públicos les interesa la ciencia zombi porqué ante la emergencia bestial de las enfermedades asociadas a los contaminantes se desvía la atención y se enreda al personal diciéndole que enferma por el estrés, por tener mal Karma y malas energías. La receta nos la podemos imaginar: raparse a cero la cabeza, ponerse una túnica blanca (amarilla en Catalunya) y salir a cantar el jare krishná a la calle.

 

A pesar de todo, creo que desde la sanidad pública aún sienten timidez y por el momento están con la estrategia de mantener drogadas a las enfermas de SQM, fibromialgia, síndrome de fatiga crónica. Así se están embalsamadas en casa y no van a dar la lata al ambulatorio o al hospital.

 

Pero no digáis que lo del rollo de las energías no ahorraría pasta a la sanidad pública catalana. Y poco después, pues a poner una ristra de ajos bajo la cama, a sacrificar gallinas en noches de luna llena, etc. ¡¡Es el puto futuro!! ¡Los curanderos modernizados!

 

Sé un consumidor inteligente

¿Qué puedes hacer tú? En primer lugar, ayudar a difundir contenidos cómo este. Por supuesto, no me gustaría que te vieras en el compromiso de elegir entre tú reputación y estatus social, y el derecho a defender tú salud y la de tus seres queridos.

 

En segundo lugar, puedes plantearte en serio convertirte en un consumidor responsable, por tú salud y la de los tuyos, y por la de todos aquellos enfermos (de asma, de SQM, etc.) que empeoran con la exposición a productos no seguros. Obviamente, el consumidor tiene el poder de cambiar al productor y eso significa que contra menos artículos nocivos compres menos se van a producir.

 

A veces se trata de hacer ver la realidad a los demás. Interioricemos que fabricar y usar esos productos nocivos implica contaminar. Da igual que uno tenga una sensibilidad ambiental enfocada en la fauna y la flora, o se centre más en el ahorro energético, el reciclaje, etc. A cualquiera ambientalmente sensibilizado le tendría que motivar la difusión de contenidos que abogan por el cambio de paradigma en el consumo y producción de artículos que dañan el medio ambiente y nuestra salud.

 

¿Cómo ser un consumidor responsable? Allá vamos. Diversas aplicaciones te pueden ayudar rápidamente a elegir productos seguros, artículos cuyos ingredientes no son peligrosos con tú salud. A continuación, te voy a aconsejar algunas de ellas. Estas aplicaciones te indicarán, mediante un código de colores, los productos saludables, de forma que podrás saber rápidamente que desodorante, gel de baño, crema, u otros contienen ingredientes nocivos o muy nocivos, y cuales son seguros. Es un juego divertido: compras productos seguros y mandas al cuerno los que no lo son.

 

En caso de que quieras profundizar, las aplicaciones también te permiten ver la lista de ingredientes etiquetados con un color en base a su seguridad, y hasta algunas de ellas (p. ej. INCI Beauty) te detallan el efecto adverso para la salud de los ingredientes perniciosos. Incluso es interesante explorar el potencial de algunos productos de cara a ocasionarte problemas de salud a través de decenas de ingredientes capaces de hacerlo…te sorprenderías al comprobar los que habías utilizado anteriormente.

 

Lo ideal es que este tipo de información la tuvieras en los establecimientos comercializadores y hasta en el etiquetado de los productos, clara y en grande. Cómo nuestros políticos se ganan la vida yendo en contra de tus intereses...mejor, se pragmático, aquí tienes las aplicaciones:

 

INCI Beauty

https://incibeauty.com/es

 

Code Check

https://translate.google.com/translate?hl=es&sl=de&u=https://www.codecheck.info/&prev=search&pto=aue

 

Cosmetic Scan

https://cosmeticscan.app/

 

No lo demores más, haz el cambio y provoca con tú elección que los tarados del ático se vean obligados a fabricar productos seguros…y difunde estas aplicaciones.